21 noviembre, 2023

NAVEGAR POR LATITUDES.

EL SISTEMA DE NAVEGACIÓN EN LA ÉPOCA DE LOS DESCUBRIMIENTOS

Durante siglos gentes de todas las partes y culturas del mundo se las han ingeniado para ir de un lado a otro por el mar sin perderse. Cada uno en su entorno y dentro de sus conocimientos idearon sistemas que les permitieran conocer donde se dirigían y su posición.

Mientras se navegará por aguas costeras no había problema, ya que se podían coger referencias conocidas de las costas. Entre generaciones de marineros estas se transmitían primero oralmente y luego se plasmaron gráficamente, naciendo las primeras cartas y rosas de direcciones. Los navegantes polinesios de las islas Marshall, por ejemplo, usaban una especie de  trenzado de fibras vegetales con conchas marinas para representar los rumbos e islas (Rebbelib). Los vikingos tenían su propia rosa de vientos (Vegvísir), etc. 


Rebbelib de las Islas Marshall

En occidente ya desde época remota los geógrafos y  navegantes plasmaron sus descubrimientos mediante escritos. Dos de los más conocidos son el “Periplo de Excilax” escrito en griego por Excilax  de Carianda a finales del siglo IV a.C. que narra la circunnavegación del Mediterráneo y el Mar Negro y el “Periplo de Hannón” (entre el s. IV al II a.C.) que según parece navegó más allá de las columnas de Hércules por las costas del Oeste de África.

El Mediterráneo era un mar conocido y muy navegado desde la antigüedad donde se podía navegar siempre con la costa a la vista y alejarse dos o tres jornadas sin volver a verla era difícil. Algo parecido se podía decir de las costas del Atlántico Norte, cuyos accidentes geográficos eran conocidos por los navegantes. Siempre que no se alejaran demasiado podían volver a ver tierra navegando hacia el Este. Ya los fenicios habían surcado las costas del oeste de la Península Ibérica y llegado hasta las islas Británicas (Casitérides)  en busca de estaño para fabricar bronce.

A partir de la edad media, cuando se abren las rutas de las especias, que en occidente tenían más valor que el oro, adquiere la navegación de altura una gran importancia. A causa de la caída de Constantinopla en 1453 se dificulta el acceso terrestre a las rutas de las especias por oriente y se ve la necesidad de encontrar nuevas rutas comerciales con a Asia  y los centros productores de especias. Estas nuevas rutas requerían la navegación de altura en muchos casos y navegantes españoles y portugueses toman la iniciativa ingeniándoselas con los conocimientos que tenían hasta el momento.

Los cuatro términos de la navegación necesarios, desde el momento en que los pilotos, lejos del litoral, debían ‘echar el punto’, esto es, saber en qué coordenadas geográficas se encontraba el barco son: la latitud, longitud rumbo y la distancia.

 La esencia de la navegación marítima se encuentra, en los conocimientos, los instrumentos y las técnicas que permiten determinar las coordenadas geográficas que definen la situación del buque en la mar y dirigir la navegación de forma segura y eficaz. Para lo cual resulta fundamental la disposición de cartografía náutica con la representación sobre un plano de la porción de la superficie terrestre donde se efectúa la navegación. Si se dispone de cartas náuticas precisas y conocimientos de los obstáculos, las corrientes y los vientos, la empresa de llevar un navío de un lugar a otro se facilita enormemente.


Portulano de Jorge Reinel  (1519)

No siempre ha sido posible determinar con precisión estos términos ya que los instrumentos y conocimientos náuticos no lo permitían, y antiguamente en la mayoría de las ocasiones el lugar del destino y la mejor ruta para llegar a él solo se conocía de oídas ya que hasta que un navegante llegaba por primera vez no había cartas ni derroteros y estos eran ocultados como secretos de estado bajo pena de muerte.

La determinación de la latitud, nuestro primer término de la navegación, esto es la posición más al norte o al sur de un barco, se determinaba con más o menos precisión desde la antigüedad utilizando diferentes aparatos que fundamentalmente median la altura meridiana a el Sol o la altura a las estrellas. Aparatos como el astrolabio náutico, el cuadrante o la ballestilla eran de uso general entre los navegantes para determinar la latitud.

Ballestilla

La longitud, posición más al este y oeste, entrañaba más dificultad. Se establecía por estima, de forma aproximada, partiendo de un punto y conociendo la velocidad y el rumbo. Constituyo uno de los mayores retos en la historia de la navegación y muchos países pusieron su empeño en solucionar este problema para lo cual no dudaron en hacer concursos y premiar a quien diese con la clave. En realidad, no fue posible determinarla con exactitud hasta que no se fabricaron cronómetros náuticos de precisión en el siglo XVIII por parte de John Harrison. El primero, el H1, fabricado en 1735 pesaba 34 kilos. En 1759 con el H4 había logrado reducir el peso a 1360 gramos.

Cronómetros marinos de Harrison


El rumbo era determinado normalmente con la brújula, que ya se conocía desde la antigüedad en oriente, pero no fue hasta el siglo XII que se comenzó a emplear en la navegación marítima. El padre agustino Alejandro Neckan cita en sus obras en el año 1180 el rudimentario sistema de calamitas, diciendo: “Los marinos en el mar que debido a tiempos nubosos pierden de vista el Sol durante el día, o que a causa de la oscuridad en la noche pierden el conocimiento del rumbo a que navegan, tocan una aguja con el imán, la aguja se pone a dar vueltas, hasta que su movimiento cesa y su punta se encuentra entonces dirigida al norte”.
 La descripción más antigua de un la aguja magnética, que perfeccionado ha llegado a nuestros días, se debe a Pedro Peregrino de Maricourt, en su “Espistola de Magnete” fechada en 1269.

Bitácora con brújula

 La distancia se podía determinar partiendo de la velocidad medida con la corredera o sistemas similares. La corredera de barquilla se comenzó a usar a principios del siglo XVI pero ya anteriormente los marinos determinaban la velocidad del barco por el tiempo que tardaba un objeto (madera normalmente) lanzado por proa en recorrer la eslora del barco. El tiempo se media mediante la ampolleta o reloj de arena.



Corredera de barquilla

Es de imaginar que la precisión que permitían dichos instrumentos y métodos dejaba mucho que desear.

Dado que hasta el siglo XVIII no fue posible determinar la longitud con precisión los antiguos navegantes navegaban por latitudes. Por la facilidad de uso, ningún método de navegación que se guie por el cielo ha sido tan útil a la navegación.

La latitud de un lugar es fácilmente determinada según la posición de los astros en el firmamento, solo es necesario determinar ésta con los diferentes instrumentos náuticos, para conocer la nuestra latitud y si conocemos la del lugar de destino conseguiremos llegar allí.

Los movimientos de los astros se recogían en los almanaques, que eran tratados y tablas que predecían la posición de los astros y el recorrido de estos a lo largo del año. Uno de los más conocidos fue el del hebreo Abraham Zacuto que fue profesor en las universidades de Salamanca, Zaragoza y Cartagena, y que publico el “Almanach perpetuum celestium motuum” en 1478. Hoy día, en España, el Almanaque Náutico es una publicación oficial que se edita anualmente por el Real Instituto y Observatorio de la Armada en San Fernando. Todos los países con tradición marinera publican sus diferentes tablas y almanaques náuticos.


Solo había que medir la altura a un astro conocido y realizar los cálculos para determinar con el almanaque la latitud a la que correspondía dicha altura.

Alejarse de la costa siguiendo una determinada latitud permitía regresar de nuevo al punto de salida siempre que se navegara por la misma latitud, pero en sentido contrario. La premisa “paralelo correr, tierra encontrar” era la base fundamental para navegar.

El navegante organizaba su salida desde un puerto conocido que se hallara en la misma latitud que el punto de llegada o en su caso navegaba al sur o al norte hasta llegar a la misma latitud que el destino para así mantener el rumbo del barco navegando siempre en sentido este u oeste según convenía.

Cristóbal Colón se valió de este método para navegar hasta el Caribe. Dado que su objetivo era llegar a la India y dado que ya conocía la latitud de Calicut, la ciudad de las especias, (11°25’ N) sólo tenía que partir de Canarias (28°N), y  navegar hacia el sur hasta alcanzar latitudes correspondientes a la India (entre 24°N y 8° N) para luego navegar al oeste y así supuestamente llegar a la India. Además, en este caso contaba con el hecho de que los vientos Alisios le favorecían. Lo que no tuvo en cuenta Colón es que entre Asia y África se interponía otro continente.

Este método no requiere cálculos complejos, todo lo necesario para mantenerse en la dirección este-oeste es mantener un cuerpo celeste en la misma altitud del meridiano, es decir su altura angular sobre el horizonte en el meridiano. Por la noche se podía utilizar una estrella (Ej: La Polar en el Hemisferio Norte), que con una corrección del almanaque cumplía su propósito.

 Durante el día se tomaba la altura del Sol por el paso del meridiano y con su declinación para el día correspondiente consultada en el Almanaque Náutico se saca la latitud mediante unos sencillos cálculos.

Los principales instrumentos para medir la altura de un astro fueron en orden cronológico: el astrolabio, el cuadrante náutico, la ballestilla, el cuadrante de Davis y el sextante. También se utilizaron otros instrumentos como el Kamal, muy usado por los navegantes árabes del indico o el circulo de reflexión y el octante que fueron los precursores del sextante. Hoy en día todavía se usa el sextante y es obligatorio el disponer de uno así como de las correspondientes tablas náuticas en todos barcos que están homologados para la navegación sin límites de distancia a costa (BOE 119 19/05/2021).

Se podía navegar este-oeste sin ayuda de instrumentos complejos, simplemente guiados por los astros o valiéndose de sencillos instrumentos como algunos de los descritos anteriormente, incluso en épocas en las que todavía no se usaba la brújula. Los vikingos lo lograban manteniendo constante la sombra proyectada por un palo vertical. (clic en el enlace para ver video)

Por supuesto que navegando en latitudes no siempre se conseguía llegar por el camino más corto ni por el más rápido. Al no conocer con exactitud el efecto de las corrientes y los vientos, ni disponer de cartas náuticas precisas, la ruta que se elegía no era precisamente la más efectiva.

Colon conocía el efecto de los vientos alisios y la corrientes ecuatoriales y los aprovecho en sus viajes de ida partiendo desde Canarias. El retorno desde el Caribe normalmente se hacía por una ruta más al norte, por las Azores, para aprovechar la corriente del Golfo y del Atlántico Norte. Todavía hoy en día son las rutas más utilizadas para cruzar el Atlántico a vela.

El “tornaviaje” desde Filipinas fue un hito en la navegación, que consiguió que el regreso desde Manila hasta Acapulco se acortase notablemente cruzando el Pacifico por el norte y aprovechando la corriente de Kuroshio. Aunque el descubrimiento y documentación de esta ruta se atribuye a Andrés de Urdaneta y Miguel López de Legazpi el primero que la realizo fue el capitán Alonso de Arellano que a bordo del patache “San Lucas” arribo al puerto de la Navidad el 9 de agosto de 1565, dos meses antes de que Urdaneta llegara a Acapulco.

El tornaviaje

 En el año 2021 se celebró  el 500 aniversario de la primera vuelta al mundo por Juan Sebastián Elcano. En estos siglos el arte de la navegación ha avanzado enormemente y no nos podemos imaginar las dificultades que tenían antiguamente para poder llegar a su destino con barcos tan frágiles y medios tan sencillos y escasos, pero esas gestas pueden compararse, si no superar, a otras como la llegada del hombre a la Luna.

Esperando que haya sido interesante.

Un saludo y siempre "por lo mojao"
Angel Romero Bello 

08 noviembre, 2023

CONFERENCIA: “REMEMBERING THE ARMADA” impartida por Mª José Mozota y Angel Romero

 Rememoración de la gesta de la Armada de 1588 en las costas de Irlanda

La Delegación de la RLNE en Aragón, con la colaboración de la Delegación Aragonesa de la RAECY, CEPYME Aragón, Federación Aragonesa de Actividades Subacuáticas (FARAS), Centro Buceo Zaragoza (CBZ), y “Columnafoto.com”, organiza la conferencia  “REMEMBERING THE ARMADA” impartida por Mª José Mozota y Angel Romero

  • DIA: martes 14 de noviembre de 2023, 
  • HORA:  19,30 horas,
  • LUGAR: Salón de Actos de CEPYME Aragón - c/ Santander 36, 2ª planta. 50010 Zaragoza. (entrada libre hasta completar el aforo)



En 1588 durante las tormentas conocidas como " El gran vendaval", 24 de los barcos pertenecientes a la Gran Armada, que habían partido desde la Península para conquistar Inglaterra, naufragaron en las costas de Irlanda. Tres de ellos, la Lavia, la Santa María de Visón y la Juliana se hundieron en la playa de Streedagh a 10 millas al norte de la ciudad de Sligo en el pueblecito de Grange. Unas 1.100 vidas españolas perecieron en el naufragio, pero algunos sobrevivieron con la ayuda de los católicos irlandeses. Conocemos está historia por el relato de uno de éstos supervivientes, el capitán Francisco de Cuéllar. Existe una asociación en Sligo, la Spanish Armada Ireland, dedicada a mantener viva la llama de este evento. Cada mes de septiembre se celebra la rememoración del naufragio, organizado por su presidente Eddie O'Gorman. Este año una delegación de la RAECY acudimos a este emotivo evento junto con una amplia representación por parte de España; El embajador español en Irlanda Ion de la Riva, el agregado de defensa capitán de navío José Luis Nieto, el vicealmirante Enrique Torres Piñeyro director del Museo Naval de Madrid y el capitán de corbeta Alexis Molinos comandante del patrullero Centinela que, con toda su dotación, participaron en los actos.

En esta conferencia se va a hablar del hecho histórico y de cómo se produjeron los naufragios que ha dado lugar a esta efeméride, así como de la participación en los actos en la que estuvimos presentes miembros de RAECY. También daremos indicaciones y pautas por si en un futuro otras personas quisieran acudir al festival que anualmente se celebra en Irlanda, conocido como “Remembering The Armada”. 


24 junio, 2023

¿QUÉ SEXTANTE COMPRAR?

¿QUÉ SEXTANTE ELEGIR?

Hoy en día todo lo fiamos a la electrónica para posicionarnos, pero no obstante todavía es obligatorio, por lo menos para aquellas embarcaciones que naveguen en “Zona 1”, es decir, que naveguen en zona de navegación ilimitada, el llevar a bordo una serie de elementos que nos permitan situarnos si la electrónica falla. Entre estos elementos esta la obligatoriedad de llevar un sextante (Real Decreto 339/2021,de 18 de mayo. Articulo 12b).

Aparte de la obligatoriedad de llevar el sextante muchos navegantes, aunque no estén obligados, están llevándolo y aprendiendo a usarlo movidos por el romanticismo que supone el navegar siguiendo los sistemas tradicionales y posicionándose por los astros. Además, existen regatas de posicionamiento, como la “Stella Oceani”, en el que la norma principal es posicionarse sin usar la electrónica, lo cual te lleva inevitablemente al manejo de un sextante.

El adquirir un sextante puede ser un quebradero de cabeza para los neófitos, y no es algo baladí, ya que la adquisición de un sextante puede suponer una considerable inversión. Aquí vamos a explicar los diferentes tipos, sus características, pros y contras y precios de referencia (a fecha de la publicación y sin tener en cuenta ofertas que puedan existir). También daremos una serie de orientaciones que os pueden permitir elegir el sextante adecuado. Mencionaremos las principales marcas y fabricantes, pero al final la decisión dependerá siempre de vosotros y de vuestro presupuesto.

Cassens & Plath - Modelo Horizon Ultra

PREGUNTAS Y CARACTERISTICAS QUE DEBEMOS TENER EN CUENTA

1º ¿Nuevo o de segunda mano?

Existe la posibilidad de adquirir un sextante de segunda mano. El primer consejo es que en el caso de adquirir uno usado comprobemos su estado, el uso que le han dado, si tiene golpes, si todos sus elementos están bien y completos, que no tenga reparaciones y que no esté ni oxidado ni con huellas de sal o suciedad. Por internet hay algunas ofertas de usados, pero en el caso de comprarlo será difícil  comprobar su estado y eso es imprescindible. Incluso lo mejor sería verificarlo repitiendo mediciones que tomemos con otro sextante que sabemos que funciona correctamente. Es importante también saber que no está descatalogado y que podremos encontrar repuestos de espejos, filtros y otros elementos que se puedan dañar con su uso. Es un aparato de precisión y como tal requiere un cuidado y mantenimiento. ¡Atención a las ofertas de sextantes decorativos que hay en internet!. Estos son replicas muy bonitas, pero totalmente desaconsejadas.

Sextante decorativo 
Kelvin & Hughes

2º ¿Qué uso le voy a dar?

Si lo quieres para cubrir el expediente y lo necesitas sólo para cumplir el Real Decreto sobre la Seguridad en la Navegación, no necesitaras gastar mucho dinero. Lo mismo, si lo quieres para escuela, para aprendizaje o como iniciación. Distinto es si te gusta la navegación astronómica o lo quieres para regatas de posicionamiento. En ese caso, es preciso invertir un poco más, y no te arrepentirás. Desde luego, todo depende del presupuesto que se tenga.

¿Lo compro de plástico o de metal?

Sea cual sea el modelo, los errores de los sextantes metálicos pueden considerarse despreciables, frente a todos los demás errores que el observador no puede evitar (refracción, imprecisión del horizonte, redondeo en los cálculos...). Se estima que el observador más experimentado que utiliza el mejor sextante no puede exigir, incluso en excelentes condiciones, una precisión promedio superior a 1' de arco (1 milla náutica). También es inútil conceder una importancia exagerada a las medidas de precisión que dan los fabricantes, porque son muy teóricas y se miden en laboratorio en bancos ópticos con láser y en condiciones óptimas, que nada tienen que ver con la realidad en alta mar. Su elección deberá guiarse entonces por otros criterios: el peso, las características de los espejos, el precio, etc.

Los sextantes "plásticos" generalmente permiten una precisión del orden de 5'. Esto es suficiente para la navegación en alta mar y para el entrenamiento, pero pueden ser un poco imprecisos para otros usos. Además, un sextante de plástico requiere revisiones y ajustes más frecuentes que un modelo de metal. La ventaja de los de plástico es que son más económicos y pesan poco y esto se nota mucho cuando debes pasarte un buen rato sujetando el sextante, cuando mides la altura de una meridiana del sol, por ejemplo. También habrá que tener en cuenta que la comodidad de usarlo en un mercante es distinta a cuando estas en un velero de 12 metros con mala mar.

Davis Mark 25 de plástico

4º ¿Con que radio del limbo?

El limbo es el arco graduado donde hago las mediciones. El radio del limbo determina el tamaño del sextante.

Un limbo con un radio grande (mayor a 160 mm) permitirá una lectura más fácil pero es un sextante más voluminoso. Mientras que un aparato con un radio pequeño (menor a 160 mm) será un sextante más compacto, más manejable, pero quizás un poco más difícil de leer. Menos de 140 mm no es aconsejable y si se encuentra alguno de esta medida puede que sean decorativos.

5º ¿Qué peso?

Un sextante bastante pesado (más de 1,5 kg, armazón de latón) proporciona mayor estabilidad y por lo tanto mayor precisión de medición. Por el contrario, el sujetar durante mucho rato un sextante pesado hace que el brazo se canse y al final esto influya en las mediciones.

Un modelo ligero (armazón de aluminio, o plástico) será más cómodo cuando tengamos que estar mucho rato sujetándolo y evitará el dolor del brazo.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que con la experiencia y la práctica logramos tomar las medidas cada vez más rápido y, por lo tanto, reducir la fatiga.

También existen accesorios, tipo arnés, que permiten sujetar el sextante frente a la cara descargando el peso del aparato en el cuerpo en lugar de en el brazo.

 6º ¿De qué color?

Para gustos están los colores. Tradicionalmente los sextantes han sido del color del metal, latonados o lacados en negro. Actualmente algunos fabricantes hacen sextantes lacados en blanco, gris o azul. Los colores claros como el blanco o el gris tienen la ventaja de que no absorben la radiación solar y el metal no se calienta al contrario que ocurre con los negros. Aunque los materiales en que se fabrican tienen bajos coeficientes de dilatación, un sextante negro siempre tenderá a dilatar más que uno blanco. Si vas a utilizarlo en sitios donde va a estar expuesto durante largos tiempos a un sol abrasador, mientras tomas una meridiana, por ejemplo, deberías pensar la opción de adquirir uno de color claro.

C&P Bobby Schenk (Blanco)


 7º ¿Qué tipo de visor?

El visor es el tubo, normalmente con óptica de aumento, por el cual se mira. Lo normal es que todos los sextantes se entreguen de serie con un visor de 3,5 (o 4) x 40. Debe reconocerse que este tipo de lente es perfectamente adecuado para la mayoría de los usuarios.

El primer dígito (3,5 o 4) indica el coeficiente de aumento del telescopio. El segundo número (40) indica el diámetro de la lente. Cuanto mayor sea este número, mejor se verá y tendrá más luminosidad, si aumenta uno de los dos números, debe disminuir el otro para que el visor se mantenga a un precio razonable.

Un telescopio de bajo aumento es ideal para las estrellas porque para ver éstas, el aumento es inútil. Es más fácil encontrar y mantener una estrella en el visor con uno de poco aumento que con mucho. Algunos usuarios incluso optan, en este caso, por un tubo vacío sin lente que permita mirar con los dos ojos abiertos, sin aumentos y con luminosidad natural.

Un visor con un aumento mayor (6 o 7) sería más adecuado para observar el sol o hacer mediciones a puntos de la tierra, porque demasiado aumento es más un impedimento.

Algunos visores son compatibles e intercambiables para varias marcas de sextantes. Cassens & Plath,  Astra y Tamaya son compatibles entre ellos y comparten visores que son adaptables a las tres marcas dependiendo del modelo de sextante y visor.

Visor C&P 4x40


8º ¿Los espejos son determinantes?

Los sextantes tienen dos espejos: el espejo de índice y el de horizonte.

El tamaño de los espejos está también está directamente relacionado con la calidad. De hecho, los espejos grandes de buena calidad son más caros de fabricar, pero proporcionan una luminosidad superior y una mayor facilidad para apuntar.

La calidad de los espejos también se mide en por la cara donde tienen el baño que permite la reflexión. Siempre será de más calidad y más luminosos, además de evitar aberraciones ópticas, los espejos que tienen el recubrimiento por el anverso (la cara delantera) que aquellos que la tienen por el reverso (por la cara trasera).

  • Espejos recubiertos en el anverso: proporcionan una imagen mucho más precisa. La imagen se refleja en la superficie frontal.
  • Espejos recubiertos en el reverso: genera una visión de la imagen menos precisa y, además, tiene que atravesar todo el espesor de la lámina para ser reflejada.

El espejo de horizonte es más determinante que el de índice en el uso del sextante.

Espejo horizonte Astra tradicional


9º ¿Espejo horizonte partido o espejo de campo completo?

Los espejos horizonte pueden ser de dos tipos: espejo partido o tradicional y espejo de campo completo.

El espejo tradicional se divide en dos partes, una reflectante y la otra transparente. Teóricamente permite beneficiarse de una mejor luminosidad, pero es más difícil de usar porque es necesario mantener la estrella en un espejo bastante estrecho. Es más difícil encontrar la estrella y evitar perder la visión de esta requiere mucha práctica.

El espejo de vista o campo completo es una evolución reciente en los sextantes. Utiliza el principio del espejo unidireccional. En estos la estrella y el horizonte siempre se mantienen a la vista al mismo tiempo. Sin duda, permite apuntar más fácilmente ya que la superficie del espejo se utiliza enteramente para mantener la estrella, y aunque su luminosidad es muy ligeramente inferior a la del espejo tradicional, esto es solo un defecto en casos extremos (estrellas muy pequeñas, niebla en el horizonte...).

Nuestro consejo: Si aún no estás acostumbrado a uno u otro tipo de espejo y dudas, te aconsejamos que optes por el "Campo completo". Su facilidad de uso es realmente una ventaja para los principiantes.

Algún fabricante como Cassens & Plath han desarrollado espejos que comparten las características de uno u otro sistema. En este caso Cassens & Plath los llama “espejos de visión clara”.

Izda. Tradicional - Dcha.  Campo completo


10º Filtros

Normalmente los sextantes llevan tres filtros de colores en el espejo horizonte y cuatro en el índice. Son preferibles los filtros de cristal sobre los filtros plásticos, y si son polarizados mejor, . Los que traen los sextantes de serie pueden ser suficientes pero la mayoría de fabricantes venden repuestos de mayor o menor filtrado de la luz para remplazar los de serie.

11º Sistemas de corrección del error de índice

Algunos fabricantes permiten que sus apararos corrijan el error de índice poniéndo este a cero con el tambor para no tener que hacer la corrección cuando se hacen los tipeos. También en otros se puede corregir el error de índice regulando con los tornillos del espejo índice, como el Davis Mark 25. Estas opciones son interesantes que las tengan, pero no imprescindibles ya que se puede corregir en los cálculos.

Tambor C&P con sistema corrección


12º Iluminación

La mayoría de los sextantes náuticos están dotados de un sistema de iluminación que permite leer las graduaciones del limbo y del tambor en la oscuridad. Es interesante, aunque no imprescindible, que dispongan de dicha iluminación. El peso de las baterías, dos pilas AAA en la mayoría de los casos, situadas en la empuñadura, apenas incrementa el peso y favorece las lecturas de noche. Eso sí, es imprescindible acordarse de retirarlas cuando se va dejar de utilizarlo por un tiempo para evitar que el sextante se dañe en caso de que se salga el ácido.

Algunos fabricantes lo suministran como accesorio, es el caso de Freiberger. Otros vienen de serie o como opción dependiendo del modelo. 

ACCESORIOS

Es importante que el fabricante disponga de repuestos y accesorios que puedan mejorar o completar las prestaciones del sextante. En muchos casos serán interesantes para prácticas en escuela, como los horizontes artificiales. Algún fabricante da la opción de configurar y elegir los accesorios cuando se compra. Otros te venden una configuración base y dan la opción de comprar los accesorios aparte. En cualquier caso supone un desembolso extra de dinero que muchas veces merecerá la pena.

Entre otros podemos encontrar:

Horizontes artificiales de reflexión.

Interesantes para hacer practicas en tierra. Permiten practicar en sitios donde no se ve el horizonte marino, pero no son utilizables en un barco ya que el balanceo del barco hace que pierdan la horizontalidad. Son una superficie de líquido o espejo que se nivela totalmente y refleja el sol o estrella que se observa. El ángulo que da siempre es del doble de la altura observada.

Horizontes artificiales  Davis y Freiberger


Horizontes artificiales de burbuja.

El horizonte de navegación artificial es adecuado para medir la altitud celeste con el sextante sin vista de horizonte natural. Por ejemplo, de noche cerrada, con niebla de superficie, o para navegación terrestre o aérea. También es muy adecuado para fines de entrenamiento.

Consiste en un telescopio que sustituye al visor estándar y permite ver en un nivel de burbuja cuando el sextante se encuentra horizontal. El principio es un nivel de burbuja que esta insertado en la trayectoria del haz óptico. Una cruz y la burbuja aparecen frente a un fondo rojo iluminado. Suelen requerir de iluminación interna. Suelen ser mas caros que un visor óptico.

Hay horizontes de burbuja más sencillos y baratos para uso en practicas pero se suelen desaconsejar para uso en navegación.

Horizonte de burbuja C&P para navegación 


Niveles de prisma o de inclinación.

Es un dispositivo que permite  determinar si el sextante no está inclinado. En caso de inclinar el sextante el horizonte que se ve a través del prisma no está alineado con el horizonte real.

En la práctica para determinar que el sextante esta vertical se inclina éste de un lado a otro “tagenteando” el astro sobre el horizonte. Mediante este prisma cuando se inclina el sextante, la línea del horizonte vista a través del prisma aparece desplazada de la que se ve directamente. Cuando se ve sin desplazar indica que esta vertical y la medición es correcta.




Nivel de inclinación C&P



Vista con el nivel de inclinación

Filtros y visores

La mayoría de los fabricantes dan la posibilidad de adquirir filtros de diferentes colores para sustituir los que vienen de serie, en caso de que se rompan o cuando queremos personalizar los colores.

También existe la opción de adquirir diferentes visores o grupos ópticos como reemplazo del que viene de serie, normalmente el 4x40 que es el mas apropiado para navegación. Los visores de más aumento, como 7x35,  dificultan el mantenerla la imagen a la vista. Como ya hemos comentado antes muchos son compatibles entre diferentes fabricantes. Astra, C&P y Tamaya tienen componentes compatibles entre si.

Visor 7x35 Tamaya 

Arnés

Para no tener que estar soportando el peso del sextante sobre el brazo existen algunos fabricantes tienen como accesorio un arnés que hace recaer el peso sobre el cuello y pecho del observador.

Arnés C&P


Cajas y herramientas.

Al adquirir el sextante normalmente nos van a suministrar una caja estándar de madera o plástico, pero seguramente podremos pedir que nos lo suministren con cajas especiales antigolpes, estancas e insumergibles.

También existen toda una serie de herramientas para el reglaje y mantenimiento, destornilladores y llaves, aceites, paños para la limpieza, etc. De serie, incluido en el precio, se suele entregar un kit de mantenimiento.

 COMPARATIVA  (VER TABLA EN PDF)

(*) El precio es orientativo a fecha junio 2023. También depende de las ofertas del distribuidor, extras, impuestos, portes, etc.

DAVIS

Fabricante de USA que hace tres modelos en plástico. Muy económicos y ligeros. El Mark 3 es un sextante orientado principalmente para educación. Los otros dos el Mark 15 y el Mark 25 se pueden usar como sextantes náuticos para iniciación y escuelas náuticas.

La principal diferencia entre el Mark 15 y el 25, aparte del color y el precio es que el Mark 25 es de espejo completo y con iluminación. Dentro de su sencillez de fabricación son bastante fiables y se pueden utilizar como sextantes náuticos. Ambos vienen en estuches de plástico con espuma y traen visores ópticos de aumento y tubo vacio. Por la diferencia de precio merece más la pena y es más completo el Mark 25. Con los tornillos del espejo índice se puede corregir el error de índice.

https://www.davisinstruments.com/collections/navigation-and-charting

ASTRA

Fabricado en China es uno de los sextantes mas vendidos debido a su precio. Buena relación calidad precio. Fácil de encontrar recambios. Tiene accesorios como el nivel de burbuja. Se ofrece con dos tipos de visores 3,5x40 y 7x35. Para algunos modelos es opcional. Los visores chinos de esta marca son de calidad excelente.

https://www.celestaire.com/product-category/marine-sextants/astra-iiib/

 FREIBERGER

Casa alemana. Calidad similar a Astra. Tiene dos modelos el Yach , de tamaño pequeño (142mm) y ligero con visor de 3,2x30 y el Drum de 170 mm con visor intercambiable de 4x40 y otro de 8x30 opcional. El sistema de iluminación es opcional

https://fpm.de/index.php?option=com_virtuemart&view=category&virtuemart_category_id=2&Itemid=264&lang=en

 CASSENS & PLATH

Fabricación artesanal alemana. Uno de los mejores sextantes que existen. De gran calidad, de mucha precisión. Tiene muchos modelos con diferentes características como de espejo completo y tradicional, con diferentes precios y con gran cantidad de accesorios. Cada modelo da varias opciones de configuración con complementos a gusto del usuario. Utiliza los mismos visores y lentes que Astra, de excelente calidad.

https://www.cassens-plath.de/en/sextants/

 TAMAYA

Prestigiosa y antigua marca de sextantes. Actualmente fabrica dos modelos el MS-733 y el MS-833, muy similares en características y precios. Aunque es un buen sextante la relación de calidad precio no es la mejor.

https://tamaya-technics.com/en/sextant/

 

Enlaces de interés

https://fpm.de/index.php?option=com_virtuemart&view=category&virtuemart_category_id=2&Itemid=264&lang=en

https://navastro.fr/

https://www.celestaire.com/shop/

https://www.depositohidrografico.com/b2c/productos/1/1/ref-2/sextantes

https://www.francobordo.com/search.php?description=1&auto=1&buscar=sextantes

Sextante antiguo (Museo de Bayona)

Espero que éste artículo haya sido útil e interesante.
Un saludo y siempre por lo "mojao"
Angel Romero Bello








07 junio, 2023

CONFERENCIA: "ORÍGENES DE LA NAVEGACIÓN" impartida por el Dr. D. Imanol Vázquez Zabala

 La Delegación de la RLNE en Aragón, con la colaboración de la Delegación Aragonesa de la RAECY, CEPYME Aragón, Federación Aragonesa de Actividades Subacuáticas (FARAS), Centro Buceo Zaragoza (CBZ), y “Columnafoto.com”, organiza la conferencia “Orígenes de la navegación”, impartida por D. Imanol Vázquez Zabala, que tendrá lugar el:

  • DIA: martes 13 de junio de 2023, 
  • HORA:  19,30 horas,
  • LUGAR: Salón de Actos de CEPYME Aragón - c/ Santander 36, 2ª planta. 50010 Zaragoza. (entrada libre hasta completar el aforo)



El Doctor en Ciencias de la Antigüedad, D. Imanol Vázquez Zabala comenzó su formación académica universitaria en 2003 y desde ese año ha ido progresivamente especializándose en cuestiones tanto de Arqueología Náutica y Subacuática, como en Patrimonio Cultural Subacuático, centrando sus investigaciones en torno a la navegación pre y protohistórica en el Mediterráneo Occidental. Como arqueólogo ha participado en varias campañas arqueológicas de diferentes periodos históricos, tanto en España, como en Italia y tanto terrestres como subacuáticas.  



17 mayo, 2023

INSTRUMENTOS DE NAVEGACIÓN (CAPÍTULO VII): SEXTANTE (Parte 2) Funcionamiento y modo de empleo

 SEXTANTE: Funcionamiento y modo de empleo

Para medir la altura del sol o de una estrella, lo primero que haremos es colocar la alidada en    0° grados y enfilar a través del visor el horizonte.


Como apreciamos en la figura a través del visor veremos una línea continua de horizonte en el espejo pequeño tanto por la parte izquierda (cristal), como por la derecha (espejo), imagen reflejada del espejo mayor.

Puede ser que el sextante no considere la línea del horizonte como el grado cero. Si es así, se debe corregir la medición del ángulo del objeto observado en igual medida que el error de la línea de horizonte, el cual se denomina “error de índice o instrumental”. Este error de índice (ei) puede ser positivo o negativo.

 




Seguidamente sin dejar de enfilar el horizonte, movemos la alidada para bajar el reflejo del Sol en el horizonte del espejo menor, tal y como se aprecia en la figura.

Efectuaremos la medición del ángulo  sobre el limbo del sextante con el nonius de la alidada. Recordemos que:

                        2Ꝕ = a


Los grados de elevación estarán en el centro de la barra de índice, dentro de una ventana sobre el arco del sextante, los minutos y segundos pueden leerse en las graduaciones de la manilla del micrómetro.

Es muy importante registrar inmediatamente la hora a la que hace la medición en horas minutos y segundos.

Se debe corregir el ángulo medido ,según sea la posición y el objeto del que queremos calcular su altura, con las siguientes correcciones (lo veremos en un caso práctico).

  •  Corrección de error de índice (ei). Este error es debido a que el sextante no detecta el horizonte como grado cero, sino como una cantidad superior (positivo) o inferior (negativo)
  •  Corrección de depresión del horizonte (D): Esta corrección es debida a la posición del observador sobre el nivel del mar.

La altura verdadera, es la que tiene el astro respecto al horizonte astronómico o verdadero.

Considerando que la luz procedente de las estrellas es paralela a la que llega al centro de la tierra, vemos que altura se puede medir en ambos lugares sin que su valor varíe.

Cuando hacemos una medición con el sextante la realizamos con respecto al horizonte de mar y no con respecto al aparente.

Así, a la altura medida con el sextante, una vez corregida con el error de índice, debe aplicarse la corrección de depresión debido a la altura del observador.


La depresión depende de la elevación del observado, y siempre será negativa. La corrección por depresión es proporcionada por Almanaque Náutico en su página 387.

  • Corrección por refracción (R): Los rayos de luz cuando atraviesan la atmósfera se refractan, sufriendo su trayectoria una desviación, de manera que se curvan hacia la superficie de la Tierra, haciendo que el objeto observado tenga una posición aparente, que siempre es una posición más elevada que la real. Esta corrección por refracción astronómica siempre es negativa y la encontramos en Almanaque Náutico en su página 387.
  • Corrección por paralaje (P): Esta corrección solo se aplica a los astros más cercanos (sol y luna). No se cumple que la medición de la altura sea la misma en el horizonte aparente que en el astronómico, como se aprecia en la figura.


P es el ángulo paralaje del astro y su corrección es siempre positiva ya que:

                 av = ao + P

En el Anuario Náutico pág. 387 hay que entrar con la altura aparente para aplicar esta corrección.

 ·  Corrección por semidiámetro (SD): Las mediciones se realizan al centro del astro, pero cuando las realizamos al sol o luna, al tener un cuerpo visible con un diámetro aparente considerable, es difícil realizar la medida al centro con cierta precisión, por lo que se realizan las mediciones a los limbos superior o inferior, por lo que es necesario aplicar una corrección,  que será negativa si realizamos la medición al limbo superior y positiva si lo hacemos al inferior.

 


Uso del sextante. Toma de datos

Toda toma de altura debe ir acompañada de la hora, lo más exacta posible, en que se realizó dicha lectura (es buena costumbre empezar a anotarla por los segundos, minutos, horas).

Hay que tener presente que las mediciones tanto de altura como de la hora en que se realizan. deben ser lo más precisas posibles, ya que  un error de 4 segundos nos dará una diferencia de 1 milla en situación geográfica, y un error en 1 grado también nos dará una milla de diferencia en situación.

Los elementos que intervienen en el problema clásico de la navegación astronómica son:

  1. Disponer inicialmente de una situación de estima SE: le, Le
  2. En ese momento determinado realizamos una o varias observaciones a un astro obteniendo una altura instrumental ai, que debe ir asociada al error instrumental del sextante ei.
  3. En el preciso instante en el que se toma el valor de una altura con un cronometro, debemos tomar la hora en tiempo universal TU, con precisión de segundos.
  4. Con los datos obtenidos haremos las correcciones marcadas en el Almanaque Náutico. El Almanaque Náutico dispone de los datos relativos a la posición de los astros en relación a su exacta medida de tiempo, obteniendo la av.
  5. El tratamiento de los datos extraídos del AN permite obtener la altura calculada, correspondiente a la situación de estima, conociendo entonces la diferencia de alturas Δa..

Ejemplo, procedamos a tomar unas alturas del SOL en un breve espacio de tiempo.


Plasmándolas en gráfico.



A la vista del grafico vemos que la tercera observación se desplaza de una imaginaria línea recta que uniría todas las mediciones, lo que nos indica que posiblemente tengamos error en ella, por lo procederíamos a su eliminación quedándonos con las demás.

De esta forma tendríamos cuatro mediciones, que como vemos en la gráfica se mantienen dentro de una alineación y calculamos valor medio de altura y hora:

 ao = 48°15.33´

Recordemos que hemos corregido las alturas instrumentales tomadas con el error de índice. En caso del ejemplo ei=+2, dcha, se ha despreciado una medición y calculado la media de las mediciones tomadas, resultando la ao, y se han realizado con una altura de observador de 3 m (lo normal en un barco deportivo) y que fueron realizadas el 27 de julio del 2015.

Con este valor vamos a trabajar con el AN (del 2015) en su página 387, en la que tenemos las correcciones para obtener la altura verdadera del SOL limbo inferior. En la tabla A corrección por depresión de horizonte. En la B las de semidiámetro, refracción y paralaje y una tabla adicional correspondiente al año y mes en que se realiza la medición.


Operativa para las correcciones:

  1. En la tabla A buscamos lo =3m, nos da un valor de -3.1
  2. En la tabla B por la altura observada nos da un valor de 15.20. (Nota: En las ediciones del AN a partir del 2016 la tabla B indica que hay que entrar con la altura aparente)
  3. En tabla corrección adicional para 27-7-15, nos da un valor de -0.25 (interpolando)

 Tipeo:


Altura verdadera = 48°27.65`


Sextante Davis Mark 25


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